Blog El arte de postergar: ¿Por qué guardas los monstruos bajo la cama?

Cuando eliges postergar, tu mente puede parecer como la cesta de ropa sucia… cada día metes más y más cosas ahí: tareas pendientes, ideas, preocupaciones… Y entre toda esa maraña, hay algunas prendas que evitas sacar. Esas son las tareas que postergas. Las que te generan una sensación de pesadez y te hacen sentir incómodo solo de pensar en ellas.

Peeero… ¿por qué las dejas ahí, arrugadas y olvidadas? Porque hacerte cargo de ellas requiere un esfuerzo que, en ese momento, te parece demasiado grandes. Prefieres creer que mañana tendrás más energía, más tiempo o simplemente más ganas. Pero ese mañana nunca llega o al menos no de la forma en que lo imaginas.

La postergación es como una bola de nieve que va creciendo cada vez más. Al dejar las cosas para después, acumulas una sensación de culpa y frustración que te impide disfrutar del presente. Además, esa tarea pendiente sigue ahí, rondando en tu cabecita y consumiendo gran parte de tu energía.

¿Qué se esconde detrás de todo esto?

Detrás de cada tarea que postergas hay una creencia limitante. Quizás te da miedo el fracaso o crees que no eres capaz de hacerlo bien. O tal vez simplemente te sientes agotado, ansioso y preocupado por la cantidad de cosas que tienes que hacer.

Siempre hay posibilidades de hacerlo diferente y es por eso que te voy a pedir que intentes hacer esto que te voy a sugerir.

  • Identifica el miedo: ¿Qué es lo que te impide comenzar? ¿Cuál es el peor escenario que imaginas?
  • Cuestiona tus creencias: ¿Es realmente cierto eso que te estás creyendo? ¿Hay alguna evidencia que lo respalde?
  • Divide la tarea en pasos más pequeños. A veces una tarea grande puede parecer imposible de hacer y lograr. Divídela en pasos logrables y cómodos.
  • Celebrar los pequeños logros: Reconoce y celebra cada pequeño avance, por mínimo que sea. Postergar, tiene una intención oculta y es la que necesitas descubrir.

En este momento mi única intención es que puedas darte cuenta de que no necesitas cargas adicionales en tu vida. Necesitas aligerar tu paso y culminar eso que has estado postergando y verás cómo tu mente y tu cuerpo se sentirán más tranquilos y en paz, porque aunque al principio lo hayas negado o evadido, la realidad es que sin duda alguna, forman parte de ti, de lo que eres y de lo que planeas sea tu propósito de vida.

¿Qué necesidad estás buscando satisfacer al postergar?

¿Puedes identificarla?

Me vas contando…

Juntos en tu proceso de sanación y transformación, ¡la seguimos! 

najiba

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