Me encontraba estancada perdida y sin fuerza para emprender nada. Venía de un proceso con una psicóloga que no me estaba ayudando a salir del lugar en el que me encontraba. Mis razones para tomar el proceso fueron las ganas de tener un cambio en mi vida y la imposibilidad de saber cómo gestionarlo…
Sentí confianza desde el momento cero y pude intuir que esta vez iba a ser efectivo el proceso.
Su trato fue amoroso, pero sin ser condescendiente, cosa que a mí me aleja bastante, ese fue uno de los principales puntos que me hicieron confiar.
Continuo con el programa, cubre ampliamente mis expectativas.
Logre confiar nuevamente en mí para generar proyectos laborales que no estaba pudiendo hacerlos.
Lo más importante para mí, fue que Naji entendió que desde la cabeza no iba a poder lograr las cosas, porque mi rapidez mental me hace vivir todo el tiempo en la mente y en la parte racional de todo lo que me pasa. Nuestras sesiones no son sesiones de conversaciones mentales, son sesiones de vivir la experiencia a través del cuerpo.
Lo recomendaría 100% porque es diferente, porque no da recetas mágicas que se puedan encontrar en libros y porque respeta pero no deja estancando el proceso de su cliente.